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La aplicación Wi-Fi Honk intenta mantener peatones seguros

Los informáticos han creado una aplicación diseñada para advertir a los usuarios de teléfonos inteligentes de colisiones inminentes.

El teléfono inteligente, el mismo dispositivo que es responsable de muchos accidentes de peatones y conductores distraídos, ahora se está aprovechado para ayudar a prevenir accidentes. Un grupo de informáticos de la Universidad de Missouri Kansas City ha creado una aplicación llamada Wi-Fi Honk para ayudar a advertir a los usuarios, que están tan absortos en sus teléfonos celulares que son ajenos a la realidad, de que están a punto de verse involucrados en un accidente.

La aplicación funciona mediante el aprovechamiento de las señales existentes que todo teléfono inteligente con Wi-Fi envía automáticamente en su búsqueda de redes para conectarse. La aplicación agrega información adicional a estas señales sobre la posición del teléfono, la velocidad y la dirección de desplazamiento. Al mismo tiempo que está enviando sus propias señales, la aplicación también está capturando señales de otros usuarios de Wi-Fi Honk cercanos. Cuando el algoritmo de predicción de colisiones de la aplicación, detecta un peligro inminente, se enviará una alerta a ambas partes.

A diferencia de un bocinazo real que pudiera no escuchar debido a la música en los auriculares del peatón, el bocinazo del Wi-Fi Honk interrumpirá al usuario para hacerle llegar una alerta más notable. Los informáticos de la UMKC informan de que han probado el sistema en situaciones reales y que pareció capaz de alertar a los conductores con suficiente tiempo para que detuvieran el vehículo, incluso cuando viajando a velocidades de autopista.

La belleza de esta aplicación es que, a diferencia de los intentos anteriores para lograr resultados similares, ésta no requiere ningún equipo especial, cualquier teléfono con capacidad de navegación GPS ya tiene la capacidad de generar los datos de velocidad a través de un acelerómetro y los datos de dirección a través de un giroscopio.

El principal inconveniente, por supuesto, es que tanto los conductores como los peatones deben tener la aplicación funcionando en su teléfono con el fin de recibir los avisos. Uno se pregunta si el fomento del uso de esta aplicación va en detrimento de todos los esfuerzos que se han hecho para que los conductores dejen de usar sus teléfonos celulares mientras conducen.

Además, no está claro qué tan bien funcionaría la aplicación en paisajes urbanos congestionados. ¿Cómo puede diferenciar la aplicación entre un peatón que se acerca a un cruce con la intención de parar, frente a alguien que tiene la intención de continuar adelante siguiendo tráfico? ¿Recibirían los conductores constantemente “bocinazos” innecesarios?

Al final, la tecnología puede servir como una ayuda para mejorar la seguridad de los peatones, pero no hay sustituto para el sentido común. Ya sea usted un peatón o un conductor, debe ser consciente de su entorno y asegurarse de que está obedeciendo las leyes de tránsito. De esa manera, en el caso de un accidente, es poco probable que sea culpable y podría obtener una indemnización por las lesiones o daños a la propiedad a través de una demanda por lesiones personales.